La importación de pinos se ha convertido en un negocio redondo para las fiestas de Navidad y Año Nuevo. Y este diciembre no será la excepción, ya que se espera que las ventas de arbolitos navideños naturales repunten en Panamá, a pesar de la crisis internacional. Sin embargo, no todas son buenas noticias. El arbolito podado, que acapara el 10% del mercado panameño, podría tener un incremento del 5% este año, debido al aumento en el precio de los fletes, informó Ricardo Gago, gerente general de las Aldeas Navideñas.
En 2008, el costo de este arbolito rondaba los $40,00. Aunque el Ministerio de Desarrollo Agropecuario (Mida) desconoce la cantidad de contenedores que ingresarán al país en 2009, funcionarios de Sanidad Vegetal manifestaron que históricamente se han importado unos 100 contenedores de arbolitos naturales. La Importadora y Exportadora Hermanos Gago traerá al menos 20% más: el número de furgones que solicitó en 2008 fue 10 y para este año pidió 12. Dispondrán de 15.000 pinos para surtir a las Aldeas Navideñas en esta temporada.
Esta compañía vende el 30% de los arbolitos de Panamá, que proceden principalmente de dos empresas canadienses, West Shore y Kyrk Company. Otro buen porcentaje procede de Estados Unidos. Según Gago, los importadores panameños prefieren los pinos canadienses, por la relación costo- beneficio, pero la presencia de arbolitos estadounidenses en el mercado panameño resulta “muy importante”, puesto que con ellos se puede complacer a la comunidad norteamericana radicada en el país.
Se espera que los primeros contenedores cargados de pinos lleguen a Panamá a finales de noviembre, procedentes de Nueva Escocia, Canadá. Con el propósito de que los arbolitos que entren a Panamá estén libres de plagas, enfermedades o alimañas, las empresas importadoras deben cumplir con los requisitos de inspección en sitio y las normas sanitarias vigentes.
El ingeniero Ariel Espino, director nacional de Sanidad Vegetal, dijo que los inspectores de Cuarentena Agropecuaria viajarán a Canadá a finales de octubre, para supervisar los pinos desde el primer corte realizado en las fincas y evitar que entren arbolitos con plagas que puedan poner en peligro el patrimonio animal o vegetal del país.
Entre los árboles escogidos para entrar a Panamá están los “premium” y podados, Los pinos podados son aquellos que se podan dos veces por año, para darle la forma cónica. Estos pinos necesitan más manos de obra y, en consecuencia, son más caros.
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